así que sonríe

Por una vez, por una sola vez, he parado el mundo y he pensado… si, he pensado, algo tan sencillo como eso… algo que no se suele hacer cuando es el corazón quien habla… he pensado que por qué entristecerme??? Por qué??? 

Pensaba en echarle de menos, en olvidarle, en que caos gobernaba mi cabeza y en lo poco tranquila que eso me dejaba vivir, en cuanto me gustaría crecer para saber que hacer y no obsesionarme con esta idea, sabiendo que por mucho que crezcas el amor es amor, y hay amores que duran toda la vida aunque no estén ni siquiera en ella… pero, como ya he dicho antes, hice una locura… y me di cuenta de que ese amargor, ese sin vivir, era totalmente absurdo, porque, claro que es bonito estar con esa persona a la que quieres de verdad, poder besarla cada día porque sabes que es tuya en el sentido mas perfecto de la palabra y sobre todo, encontrar a una persona a la que amar con toda el alma que hasta te vaya la vida en verla sonreir y que encima, esa persona te corresponda… pero la realidad es que a veces, no es asi, hay veces en que esa persona desaparece de tu vida sin volver a dejar rastro mas que el que tu creas, otras esa persona se mantiene en tu vida sin saberlo e incluso otras, esa persona ni siquiera llega a entrar en ella… y os preguntareis ¿ que tiene de bonito ver como la vida, tú vida, esa persona, se te escapa de las manos?  

Es muy sencillo, esta conclusión estuvo fuera de mi alcance durante más de 10 años, a veces latente, siempre presente, pero nunca visible, hasta que la encontré…  es realmente precioso poder decir algún dia “yo he amado”, simplemente… Que tengas la suerte, la increíble suerte, de estar con ESA persona… eso es perfecto, pero no por no ser perfectas, las cosas dejan su belleza a parte.

Después de esa gran persona… después ya no hay otra así, si la hay es que antes no la hubo. Pero si que, después de asumirlo, de llorar… llorar y llorar, o no…, de vivir, y sobre todo, de reir, muchisimo…. llega alguien que… no vuelve a ser ese gran amor, pero sí que es muy muy grande, tan grande que consigue taparte la visión hacia ese hueco que había quedado tiempo atrás, y empiezas a reir… a ilusionarte… a quererle… y ¿por qué no? a ser feliz, y ya no importa tanto no tenerlo todo, porque tienes todo lo que necesitas, asi que la vida vuelve a pasar, y ves como poco a poco te devuelve la mayor parte de lo que te había quitado, o te regala eso que te negó y tan pacientemente esparabas… Es entonces cuando dices “ he amado, he querido y he sido querida” y ya no importa tanto el orden de los factores, si han sido acompañados por un “me han amado”, o si fueron mucho tiempo atrás… ocurrieron, realmente estuvieron ahí, sentiste algo, algo muy fuerte aunque no fuera muy bonito, y algo muy muy bonito, aunque no fuera tan fuerte… y eso, pase lo que pase, siempre quedará.

Ahora, si quereis, volved a preguntarme ¿y que tiene de bonito ver como la vida, tú vida, esa persona, se te escapa de las manos?, porque ahora lo entenderéis cuando os conteste que la vida, si sientes, no pasa…  cuando sientes, la vives, porque tienes algo que vivir y eso…eso es lo más bonito que hay.